domingo, 14 de febrero de 2016

OLGA ZAMBONI: UN RÍO DE BELLEZA SUPREMA por Hugo Borgna (Rafaela, Santa Fe)


“Ríos de memorias y silencios”, con textos de Olga Zamboni, es un objeto artístico en forma de libro, surgido en lo material y conceptual de Editorial PALABRAVA (integrada por autoras de fuerte raíz local y regional) en octubre de 2015, y contiene 91 páginas de poesía y material fotográfico de excepcional nivel.

“Un dolor se afina en el costado / En rubores de fiebre se estremece la piel / En la total inercia los músculos se aduermen / sueño convaleciente / aleja rumores de bonanzas / En el silencio interminable / quisiera aullar pero el dolor no tiene voz / Ese dolor pequeño sigue ajustando sus espinas / me dice que hay que seguir / la herida picada abierta / porque la vida continúa / Aunque el dolor siga afincado en mi costado”

Si aceptamos que crear poesía es unir en un solo texto la profunda vivencia interior y las sensaciones externas que nos rodean y acosan, y convertir ese conjunto doble en un nuevo universo sensible y palpable poblado de imágenes de todo tipo y de una luz de brillo renacido a cada momento; si podemos reconocer en unos versos la llama humana que nos alimenta, es que estamos percibiendo la poesía dolida y bella que nació de Olga Zamboni.

Al mismo tiempo, si agregamos a ese conjunto de elaboradas palabras, las fotografías de María Eugenia Maffini, Trini Alvarez y Ernesto Engel, tan llenas de significado que parecerían estar vivas, estaremos dando una descripción sólo ligera de esta obra  hondamente humana y bella, que sugiere con fuerza y deseos de vivir (Carpe Diem) mientras mira con pavor las nuevas heridas que van naciendo.

“Nadie me llore ahora / Algo de mí, quizá lo mejor, sobreviva / en un jazmín; una brizna / de la tierra y el aire / que en amor contuvieron los sorbos de mi vida”

Olga Zamboni es un producto de la selva misionera, una habitante de un espacio que ella muestra como un río; es el resultado de su misma poesía, una metáfora feliz que intenta la perpetuación a través de la palabra que fluye (como el agua) pero queda en el tiempo y en los hombres a pesar de que los ríos muchas veces se dispersen  y pierdan su personalidad convirtiéndose en sólo una parte del mar. Este libro es el emotivo legado de sus horas hasta el fin de los tiempos. Merece mucho más que el relato justiciero de sus logros, merece que los ojos de todos los lectores se mojen con la emoción de sus verdades de agua y de sombras de selva y luz desde lo alto. Es una sensación vital que sólo cumplirá su destino uniéndose a la recepción por otras vidas que amen la posibilidad de emocionarse.

Profesora en letras, ejerció la docencia en todos los niveles. Coordinó talleres literarios. Fue miembro de la Academia Argentina de Letras. Dictó cursos y conferencias en el país y el extranjero. Publicó cuatro libros de poesía y cinco de narrativa, e integró numerosas antologías. Fue primer premio en SADEM 2003, de novela con “Variaciones de un verano”. Ella misma no aceptaría, ni aún ahora, ser un río poblado solamente de memorias y silencios. Falleció el 26 de enero de este año en Posadas, Misiones.