sábado, 15 de septiembre de 2012

Comentario en Diario La Opinión de Rafaela - Por Hugo Borgna


“El centro de la gravedad”, de Enrique Butti (edición 2012 de PALABRAVA Editorial, novela, 98 páginas) es el segundo ejemplar de la serie “Las cuatro estaciones de la palabra”, producida por la editorial mencionada con el objeto de difundir la obra de escritores de la provincia y estimular la lectura.
Cuenta en primera persona y varias voces una inquietante historia que hace equilibrio permanentemente entre la ficción y lo real, entre el sueño y la vida.
Transcurre en un laboratorio, con un ambiente enigmático (acertadamente relatado en primera persona, mostrando un extraño experimento, al límite de lo concebible donde están en juego la vida y sus consecuencias, ubicado en un reducido grupo familiar. No es convencional el tratamiento del argumento, ni la tesis en sí misma, donde la clave parece ser una frase puesta en uno de los primeros capítulos “no somos dueños de nuestro destino”. Un túnel es la entrada hacia la apertura total: de la historia relatada y de un enfoque ambicioso del modo de contar, de capítulos intensos, enigmáticos de relativamente pocas líneas.
Los hechos son de naturaleza profunda y su presentación apasionante: el lector queda atrapado y desea legar al final del libro, donde se cierra la secuencia y se abren interrogantes. Dentro de una original propuesta en el modo de relato, Enrique Butti intenta una renovación, un nuevo ámbito en la concepción de un argumento y en el modo de la exposición, apoyándose en el asombro y la sorpresa y deja planteadas cuestiones como: ¿se puede volver al orden preestablecido cuando se han roto los límites convencionales? ¿es posible el desdoblamiento de la personalidad humana? ¿Existe el centro de la gravedad como base y guía para los retornos? ¿o el conflicto está simplemente en el choque entre lo que se quiere y lo que se puede?
“El centro de la gravedad”, además de proporcionar un inusual placer estético, abre múltiples posibilidades para el uso de la palabra y, para el acto de creación literaria, un ambiente mucho más espacioso y libre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario